31 de octubre de 2012

Cuestión de fe


Noviembre es el mes en el que tradicionalmente recordamos a todos nuestros familiares y allegados difuntos. Durante los primeros días del mismo, los cementerios se llenan de visitantes, de familias, de flores y de recuerdos. Junto a estas fechas señaladas, encontramos Halloween, una fiesta americana que se está poniendo de moda en España en los últimos tiempos y que evoca al lado oscuro, tenebroso y terrorífico que le atribuimos a espíritus, difuntos y otras fuerzas paranormales. Esta fiesta permite al público, caracterizarse de seres de esa dimensión que por respeto, miedo o por el simple hecho de no tener evidencias de ella, tendemos a tildarla como tabú, el más allá.
Existen muchas creencias acerca de este mundo e incluso hay personas que dicen tener el don de conocer y ser partícipes de los misterios que oculta éste.

La curiosidad por este tema, nos llevó el pasado curso a tres compañeros míos y a mí a realizar un trabajo de investigación sobre el mismo para una asignatura. En él, tratábamos varios tópicos, como era el de los curanderos, mal de ojo o exorcismo y durante el proceso contamos con la colaboración de personas que de alguna u otra manera están insertos en esta dimensión oculta.

Por otra parte vivimos de primera mano, el testimonio de gente que, por desesperación, acuden a curanderos, puesto que para ellos es un apoyo y un gran alivio en su vida, pero cabe destacar, la cantidad de “curanderos” que se valen de estos “poderes” para beneficiarse económicamente, algo que hace que nos planteemos varias cuestiones. ¿Qué puede llevarles a creer que lo que no ha podido curar un médico, lo haga un señor con sus manos?, ¿Qué hay de verdad en todas esas personas que aseguran tener este don? ¿Cuántos hay que se aprovechan sin escrúpulos de la gentileza de muchos? ¿Existe el más allá? Tras un largo trabajo de investigación y tras analizar todas y cada una de las historias reales que nos contaban tanto personas totalmente creyentes como personas totalmente agnósticas, la única conclusión que pudimos obtener en claro es que nada es falso o verdadero, tan solo, cuestión de fe.


2 comentarios:

  1. Sobre el tema de los curanderos... Yo especialmente si que creo en estos temas, aunque reconozco que hay mucho farsante por estos lares en el que solo ven el tema económico y no se paran a pensar en las personas que acuden a ellos de manera desesperada y con una confianza plena..Algo parecido ocurre con las los curas.. Las iglesias....

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    1. No todos los curanderos llevan esa condición, ni todos los curas son iguales. Hay que saber diversas opiniones para elaborar una conclusión.

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